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Toda la vida, en España y en todo el mundo, han existido lo que podriamos llamar "picaros", es decir personajes tortuosos cuyo fin en la vida es aprovecharse de la inocencia del otro, obligarlo, para decirlo de alguna manera, a equivocarse y sacar un beneficio de esa equivocacion.
Por dificil que resulte reconocerlo, en la sociedad actual lo que a triunfado no es el bien sino justamente su contrario, es decir, las personas que consideran que no hay que cumplir con lo que se promete y el que lo hace es un simple tonto que nunca podra hacer dinero.
Esta aseveracion es compartida por muchas pero muchas muchas empresas constructoras que parecen burlarse alegremente de sus clientes al prometerle una cosa y, una vez cobrada su tarifa, hace otra completamente distinta, como si no tuvieran un minimo de moral, o de conducta a que atenerse.
Por supuesto, existen excepciones en este rubro, personas honradas, hombres y mujeres buenos que consideran que un servicio debe cobrarse a un precio justo porque un cliente, mas que un cliente, debe ser considerado un amigo.
Mucha gente rie al oir comentarios como estos porque, para ellos, lo que existe hoy en el mundo es el capitalismo salvaje en el cual debe matarse al otro -figurativamente- para poder sobrevivir; en realidad, no es asi, y una de las muestras mas claras la dio Cordyman, una empresa constructora de Leon que lleva trece años de feliz trayectoria.
Esto le ha permitido convertirse en un referente dentro de las constructoras inmobiliarias de Coruña y, al mismo tiempo, conseguir el milagro cada vez mas extraño de hacer que las personas se sientan tranquilas al mencionarla porque, al menos en un sitio, ciertos valores -honradez, transparencia, etc- se mantienen intactos.
Para saber mas al respecto solo ingrese al sitio web de Cordyman.
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